Grecia, en boca de todos hoy día, pero por las razones equivocadas.
En este blog alguna vez hay que hablar de arquitectura. Hoy es uno de esos días. No os preocupéis que no me voy a alargar demasiado para no aburriros. El formato de un blog no puede extenderse en entradas larguísimas, con mucho contenido. Tiene por fuerza que ser corto, no da para mas. Es por ello que esta entrada solo pretende daros a conocer a uno de esos arquitectos desconocidos para el "gran público", tan desconocido que ni siquiera muchos profesionales son capaces de recordar su nombre, Dimitris Pikionis. De hecho tengo que reconocer que he tenido que buscarlo en Google para escribir su nombre correctamente. Si os gusta y queréis saber mas, compraos un libro.
Os presento a Dimitris Pikionis, vulgarmente conocido como "el griego ese que enlosó la Acrópolis".
Y es que el amigo Dimitri era uno de esos tipos que te enervan cuando lees sobre él. Pues este tipo con cara de cabreo resulta que estudió Ingeniería Civil en Atenas, después se fue a estudiar escultura y dibujo a París y Munich, trabajó en el estudio de Chifflott, tomó clases de Composición Arquitectónica en la École des Beaux Arts de París, regresó a Grecia y retomó la arquitectura. Eso es un currículo y no el del Varoufakis.
Ahora ya si que puede que os suene algo este tipo. Muchos de vosotros habréis ido de vacaciones a Grecia y entre copitas de Ouzo, atracones de Musaka y baños en las playas de las islas, habréis sacado un hueco para visitar la Acrópolis. Mas que nada para que vuestras madres no digan a vuestra vuelta que no ha servido de nada todo lo que ellas han invertido en vuestra educación. Pues el camino que pisasteis para subir a la Acrópolis fue la gran obra de su vida. Cuatro años de trabajos para que ahora unos turistas en bermudas y chancletas lo pisen casi sin mirarlo.
162 visitas en 24 horas, no sé a vosotros, a mi me parece una pasada...
Puede que a otros les parezca poca cosa, a mi me parece algo grande. No que este blog sea grande, que no lo es, solo son pequeñas reflexiones de este humilde servidor. Grandes sois cada uno de vosotros, todos los que habéis entrado, los que habéis comentado, y sobre todo, aquellos que me habéis hecho sugerencias y/o me habéis felicitado por teléfono, whatssapp o en persona.
A todo esto, ¿de qué va este blog? principalmente de arquitectura claro, pero también de música, viajes, arte o cualquier otra cosa que se me pase por la cabeza, para eso es mío. Bueno, mío y de mi socio Miguel Luis Cuevas al que conoceréis en su momento. ¿O creíais que lo de Cuevas venía por la alegoría de la caverna de Platón?. No amigos, no soy tan intelectual.
Este blog, principalmente, pretende ser un escaparate (Tengo la secreta esperanza que me sirva para conseguir el encargo del Guggenheim de Los Remedios), pero también una válvula de escape, mi válvula de escape.
Advertencia, este blog no es democrático, es de hecho la dictadura del arquitecto. Todo se mirará a través de la mirada del arquitecto, con todos nuestros defectos y todas nuestras virtudes. Con toda nuestra integridad. Sea que estemos hablando de una película, de un viaje o de una moto.
No pretende ser políticamente correcto. No pretendo seguir el camino trazado. Pretendo hacer un camino, mi camino. Es un camino individual, vosotros buscaros el vuestro.
Quizás no me esté explicando bien. Esto lo hizo mejor Gary Cooper en la película "El manantial", King Vidor, 1949. Película no recomendable para borregos, seguidores de la plebe, Podemistas y perezosos mentales.
Saludos y gracias a cada uno de los 162.
P.D.: No esperéis una entrada diaria, es demasiado trabajo.
Como aquella vieja canción de los 90´s, a los arquitectos Españoles nos han noqueado, nos han "partido la boca", nos han dejado tirados en el barro con un mínimo hálito de vida pensando que nunca más nos levantaríamos.
Casi lo consiguen...
A los arquitectos nos han tachado de elitistas, de soberbios, de snobs (ahora los llaman "Hipsters") de estar ensimismados en nuestro propio mundo sin prestar atención a las necesidades de la gente corriente. Quizás sean ciertas muchas de esas acusaciones como también lo es que la "gente corriente" suele prestar muy poca atención a todo lo que no sea la liga de fútbol o el último amante de "la Preysler". Todo aquello que suponga una mínima reflexión u abstracción, todo aquello que suponga un esfuerzo intelectual mas allá de repetir mecánicamente lo ya aprendido, les parece extraño.
Es por ello que cuando un profesional profundiza en el encargo de un cliente mas allá de lo que el propio cliente le solicita, algo chirría en los engranajes de la sociedad. No estamos acostumbrados a que nos den mas de lo que pagamos o nos merecemos. Pues eso señores, lo hacemos los arquitectos todos los días.
No le pida usted a ningún otro profesional que trabaje mas de lo que se le ha pedido ni mas horas de las que se le van a pagar. No le pida usted a ningún otro profesional de ningún otro sector que repita, ¡y gratis!, todo lo trabajado con el simple argumento de que "no le gusta". Total, son solo "cuatro dibujos".
Si, nos han noqueado, pero nos levantamos de nuevo, y ahora con mas marcha...
